Emociones al por mayor

El color de la tarde en la cancha de Almagro se vivió en las tribunas y Mundo Ascenso hablo con los hinchas en la previa, el entretiempo y luego del encuentro para compartir junto a ellos la pasión por sus equipos. En esta nota revivimos el sentimiento de los simpatizantes de Chacarita y Huracán.

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Un enorme operativo policial para un encuentro considerado de alto riesgo que terminó siendo tan emocionante como el espectáculo que brindaron ambas hinchadas. Una hora antes del comienzo del cotejo, ocho micros repletos de simpatizantes de Huracán comenzaban a darle color a los alrededores de la cancha de Almagro, todos cantando por un "Globo" que había logrado una muy buena diferencia en Parque Patricios y que esperaban poder sellarla en el estadio "Tricolor". Es que muchos ya hablaban del partido con Argentinos Juniors imaginando que los tres goles del martes pasado habían sido suficientes como para jugar la Promoción: "Que se preocupe Argentinos Juniors, en Chaca no pensamos porque siempre fueron hijos nuestros. Hoy ganamos uno a cero tranquilos, ellos son los que tienen la obligación pero igual los vamos a dejar calientes", decía "Tony", un hincha de Huracán. Alexis prefirió ser más cauto, como imaginando lo que sucedería minutos después: "No podemos festejar hasta que no se termine el partido, esto es así, con Huracán no te podés confiar, pero ojalá pasemos sin problemas". Luego agregó un poco más metido en el sentimiento que le genera el "Globo": "Esto para nosotros es una caja de fósforos, estamos acostumbrados a estadios grandes, llevamos de quince a treinta mil personas, no como Chaca que es de la C, por eso nos dan tan pocas entradas".

Otro simpatizante que se prendió al debate nos decía: "Tendríamos que haber hecho dos o tres goles más en la ida, era para una goleada mayor, ojalá hoy no tengamos que sufrir".

El partido comenzó y de alguna manera ese hincha que afirmaba no estar tan tranquilo por la irregularidad de Huracán, tenía mucha razón. Fue todo del conjunto dirigido por Rivoira, una, dos, tres y tantas chances que tenía el local alcanzaban para darle al partido un marco de emoción envidiable. Es que la gente de Chacarita se dio cuenta que a pesar de todo lo que se había comentado en la semana, su equipo mostraba actitud, tenía las garras necesarias como para dar vuelta la historia y estuvo muy cerca de lograrlo. Consiguió dos goles en el primer tiempo y se llevó todos los aplausos al vestuario. En el entretiempo vivimos la alegría de los hinchas "Funebreros" quiénes nos comentaban: "Si este equipo juega como lo viene haciendo hasta ahora, estamos para ascender, lo que pasa es que deben mantener esta actitud frente a un equipo como Huracán que en la ida demostró lo complicado que es. Estoy muy nervioso porque no veo la hora de que Chaca meta el tercero que sé que se puede porque huevos sobran". Un señor de unos ochenta años aproximadamente se mostró muy emocionado, con lágrimas en los ojos así hablaba de su amado Chacarita: "Hace tantos años que lo vengo a ver, pero hoy de verdad me siento orgulloso por como están jugando, se nota las ganas que tienen y se merecen golear. Si se nos da los invito a casa a festejar".

Del lado de los más chicos, un grupo de tres hinchas agregaban: "Seguro que le vamos a ganar por muchos goles y después que se prepare Argentinos porque nadie nos quita el sueño del ascenso".

El segundo tiempo tuvo al conjunto de San Martín como el gran protagonista, buscó, peleó y siempre la suerte estuvo del lado del "Globo", sin dejar de destacar la muy buena labor del uno "Quemero". Con el correr de los minutos, el nerviosismo crecía de ambos lados, Huracán estaba muy cerca del objetivo pero a la vez muy cerca de que le convirtieran el tercero mientras los de Chaca casi ni podían respirar con cada ataque de su equipo. Finalmente y como es prácticamente una costumbre esto de que en el fútbol no existe la lógica, ganó el "Funebrero" pero festejaron los de Parque Patricios.

Un aplauso gigante fue el que se llevó el equipo de Rivoira, el entrenador que supo ganarse el reconocimiento de la gente. "Rivoira no se va, Rivoira no se va", le cantaban en el vestuario y el técnico sólo tuvo palabras de agradecimiento para la hinchada: "La gente terminó aplaudiendo de pie a este equipo, eso me enorgullece de una manera inexplicable. Nosotros tratamos de que Chacarita peleara cosas importantes, estuvimos muy cerca de conseguir el resultado, si este partido terminaba cinco a cero nadie se iba a extrañar, pero no fue así aunque igual me voy felíz. Cuando uno termina un campeonato y se va aplaudido de esta manera, creo que reconforta, amo a este club y me pone más que contento que la gente se haya ido conforme. Todavía no sé que voy a hacer, hemos iniciado una conversación para que yo siga, me siento como en mi casa así que espero que se pueda dar", reconoció el "Chulo".

Leandro Grimi fue muy realista a la hora de analizar el encuentro: "No tuvimos una buena tarde y con esto demostramos que no era mentira lo que habíamos declarado el martes, muchos se rieron cuando dijimos que todavía faltaba jugar noventa minutos y hoy todos vieron lo que pasó".

Los hinchas de Huracán respiraron apenas Collado decretó el final pero de todas maneras se notó un cierto enojo de la gente por la actuación de los dirigidos por Mohamed. Es que saben que para jugar ante Argentinos hay muchos puntos por mejorar y a algunos les preocupa el poco tiempo que hay para trabajar sobre los errores.