Últimos Posts

27 agosto 2007

SE GOZA, SE SUFRE...PERO SE GANA!

Triunfazo del Globo en el Gigante de Arroyito. Después de un muy buen primer tiempo, con fútbol, marca y llegadas, casi al final del mismo Mendoza consiguió el gol que al final fue el del triunfo. El segundo tiempo fue para aguantar, sufrir y esperar por alguna contra, que por poco no llega. El arquero y los tres del fondo, baluartes. Ahora empiezan a tener valor los empates, regados por la transpiración que nos costó este triunfo.


Fuente
Semanario Quemero






¿Qué pasó que en Rosario vimos dos tiempos tan diferentes?
¿Dónde estuvo el cambio táctico/estratégico que hizo que después de un primer tiempo que mostró a un Globo compacto, tuvimos que padecer un segundo tiempo casi casi metidos dentro del área de Barovero?
Vayamos por partes.
El Globo jugó el primer tiempo con autoridad, casi sorprendiendo a los jugadores rosarinos, a su técnico y a su gente.
Una primera mitad "a lo Mohamed". Solamente faltó que los jugadores copiaran la coqueta boina que luce nuestro técnico. Cada uno sabía lo que tenía que hacer, hasta hubo tiempo de hacer "la gran Mohamed" en un saque lateral y de conseguir el gol a los 43 minutos con una contra perfecta.
Salvo los primeros 2 o 3 minutos, el resto fue todo de Huracán.
Lo tuvo Sánchez Prette por arriba, cuando cabeceó bombeado al ángulo y la descolgó Álvarez.
La tuvo por abajo Mendoza, cuando después de una combinación dentro del área el pecho del arquero le dijo no y un defensor le tapó el rebote.
Barovero fue exigido solamente una vez, en esos primeros instantes mencionados sacando al córner un disparo bajo de afuera que parecía sencillo y prefirió asegurar.
Un análisis liviano línea por línea nos va a permitir encontrar la clave de lo que pasó en el segundo tiempo.
El arquero, sin fallas, descolgó un par de centros y la mencionada tapada abajo. Los tres del fondo sin fisuras, bien arriba, bien con la pelota.
En el medio, no vamos a ser reiterativos con la labor de Barrientos, pero "el Hugo" sigue demostrando que tiene un nivel superlativo. Marca, corre, corta juega y hace jugar. Los carrileros con mucho "ida y vuelta", o sea cumpliendo su función y anulando las eventuales subidas de los rosarinos que cumplen la misma función.
Sánchez Prette y Coyette generaban fútbol para los dos de arriba y, fundamentalmente, algo que no debiera ser una virtud, pero en el fútbol actual sí lo es: Los pases se los daban todos a los de camiseta blanca.
Los dos de arriba obligaron al error de la defensa permanentemente. Mucha presencia en el área, mucha cortina para que sus compañeros entren libres (la mencionada de Sánchez Prette y otra que peinó Paolo Goltz - gana siempre de arriba - y que no llegó a puntear Nieto a centímetros de la línea).
El gol fue una contra después de que, tras un centro de Rosario y cuando "no dejamos a nadie arriba", salieron cuatro jugadores a máxima velocidad, tomaron al Canalla desbalanceado y Franco Mendoza de cara al arquero la tocó a un rincón. Al lado de Mendoza entraba Nieto, por la derecha llegaba Zarif y por la izquierda Sánchez Prette, así fue de masiva esa contra.
Segundo Tiempo. No se había acomodado nadie, iban 15 segundos, cuando Mendoza tuvo, después de un desborde, el gol en sus pies y por centímetros no convertimos el segundo. Parecía que se iba a repetir la tónica del primero, pero no.
A partir de allí todo fue de Central. Y cuando decimos todo decimos que no fuimos capaces de dar dos pases seguidos sin que la pelota volviera a pies de jugadores canallas.
Barovero siguió descolgando todo. Los tres del fondo (muy bien Puertas, con mucha actitud) seguían sacando todo.
Barrientos empezó a retroceder y se paró delante de Puertas y, en lo que creo fue la clave, tanto Poggi como Zarif "desaparecieron" del partido.
Sánchez Prette debía marcar más que jugar y si bien también Coyette no encontró más el fútbol y los dos de arriba estaban aislados, todos los ataques de los rosarinos venían por las bandas (fundamentalmente por la derecha de ellos, nuestra izquierda, donde Poggi era un espectador)
Entonces llegó el tiempo de aguantar. Y se aguantó bien. Con temple, con marca y con coraje.
Nieto tuvo un cabezazo de pique al suelo a los 38 que con un poco más de dirección cerraba el partido, pero no, el goleador sigue ausente y a seguir sufriendo.
Para colmo en una segunda amarilla insólita (no entendimos si fue por seguir la jugada después de que el juez pitó offside, si interpretó que le quitó la pelota al arquero cuando este la tenía asegurada o qué) Sánchez Prette vio la roja (¡otra vez!) y con diez había que hacer la heroica.
Los cambios poco aportaron (solamente la frescura de De Federico que con un poco más de decisión podría haber marcado el segundo, que se le fue al lado del palo) pero transpirando los de adentro y los de afuera, llegó el final.
Estos tres puntos le dan mucho valor a los otros tres que teníamos. Ahora otro triunfo el miércoles nos daría un respiro y la posibilidad de colarnos con los de mitad para arriba. Pero no nos adelantemos, gozamos un primer tiempo, sufrimos el segundo . . . pero ganamos, y "de la mano del boina a boina" demostramos que podemos.

Comentario: DR / Cuadro síntesis: MR / Fotos: TyC y Fotobaires

No hay comentarios.: